martes, marzo 06, 2007

¿Es el ser humano responsable de la desertificación reciente?

Esta pregunta está siendo debatida en estos últimos años, pues hace poco era impensable. Ni se formulaba ni se imaginaba algo así. Pero poco a poco se va haciendo evidente que algo tenemos que ver con la desertificación reciente del planeta, desde hace unos 6.000 años cuando empezaron las culturas megalíticas en el Mediterráneo, en Mesopotamia y en el Pacífico.

En un mapa del antiguo lago Chad (ahora reducido a la zona rellena de azul), podemos ver lo que fue su extensión hace 4000 años (paleo-costa azul) y 5000 años (paleo-costa rosa). Entonces estaba el Sahara tan poblado, que cientos de ruinas neolíticas están conservadas cada pocos kilómetros entre los campos de dunas. Incluso hay arpones de hueso, vértebras de enormes percas y cerámica decorada, conservados entre capas de rocas lacustres (diatomitas) que el viento ha modelado en colinas en forma de "lomos de ballena" (yardangs).

Y la reducción drástica del gran lago "Mega-Chad" no es el único caso. Otros muchos lagos enormes se secaron en Libia, Sudán, Mauritania, Asia central...

Cuando se han datado los inicios de grandes civilizaciones, se ha comprobado que su inicio precede a los grandes ciclos de desertificación. Así, hace unos 5000 años se iniciaron en el Pacífico los grandes ciclos de calentamiento y sequía (ENSO-El Niño) , que no existían anteriormente. Por esa misma época se desarrollaron culturas megalíticas en Perú (ver Sandweiss, D.H. et al., 1999 - Transitions in the Mid-Holocene. Science, 283: 499-500). Un deterioro climático hacia la aridez se detecta en Egipto y Palestina hace unos 6,300 años, y en el Norte de Mesopotamia hace 4,200 años (Dalfes et al., 1997 - Third millenium B.C. climate change and Old World collapse. NATO ASI ser. 1, vol. 49. Springer Verlag). En vez de producir el colapso de culturas previas, estas crisis climáticas coinciden con la expansión de la civilización egipcia y mesopotámica. Igualmente en esa época se desarrollan culturas importantes en Australasia, China y Japón. En España, la cultura de Los Millares en Almería ha dejado también restos megalíticos y de grandes herbívoros acompañados de roedores riparios, indicadores de clima húmedo. Su desarrollo hace unos 4000 años también precede al inicio de la actual desertificación.

Nos puede parecer que aquellos hombres eran tan pocos y tan poco industrializados que no pudieron cambiar tanto al planeta como nuestra civilización actual. Y sin embargo, aún la pequeña cantidad de humanidad de entonces dejó grandes monumentos y huellas de su actividad que indican la gran desforestación, el descenso del nivel de los acuíferos y la extinción local de grandes mamíferos. Jirafas, grandes rebaños de rumiantes, cocodrilos y avestruces vivían en Libia, Níger y Argelia, como atestiguan las pinturas y grabados rupestres (en la foto, grabados del Sahara al sur de Argelia).